Por Matias Kehaike (Estudiante de abogacía, Facultad de Derecho, UBA)
y Franco Ercolino (Estudiante de medicina, Facultad de Medicina, UCA)
El consumo de alcohol en exceso puede tener consecuencias muy negativas para la salud. A corto plazo, el alcohol puede disminuir la capacidad de reacción y coordinación, aumentar la impulsividad y los comportamientos de riesgo, y producir mareos, náuseas y vómitos. Además, puede afectar la capacidad de memoria y de aprendizaje, y aumentar la probabilidad de sufrir accidentes y lesiones. A largo plazo, el consumo excesivo de alcohol puede causar una gran variedad de problemas de salud, como la cirrosis hepática, el cáncer de hígado, el daño cerebral, la pancreatitis, la depresión y la ansiedad.
En cuanto al ámbito legal, el consumo excesivo de alcohol puede tener implicaciones en distintas situaciones. Por ejemplo, conducir bajo los efectos del alcohol puede ser considerado como un delito en muchos países, y las consecuencias pueden ser muy graves, como multas, pérdida de la licencia de conducir o incluso penas de prisión en casos más graves. Asimismo, el alcohol puede ser utilizado como una droga para cometer delitos como el abuso sexual o la violencia doméstica, lo que puede derivar en graves consecuencias penales.
De esta manera, las leyes de tránsito tienen la finalidad de resguardar la vida, y su aplicación clara y dinámica es una forma de reducir los siniestros viales relacionados con el alcohol. La aplicación es más eficiente cuando aquellos posibles autores de faltas de tránsito, o en su peor caso de siniestros viales están expuestos ante campañas de concientización pública obligatoria, lo que genera una rápida reducción del número de infracciones y por consiguiente de siniestros viales. De igual forma los controles de alcoholemia en la vía pública y la implementación de herramientas de detección de dichas faltas son mecanismo que han demostrado disminuciones importantes en dichos siniestros viales.
Es importante destacar que las leyes y regulaciones relacionadas con el alcohol varían de un país a otro, y que es necesario conocer las normativas específicas para evitar infracciones y sanciones. En algunos países, se ha implementado una política de tolerancia cero para la conducción bajo los efectos del alcohol, lo que significa que cualquier cantidad de alcohol en la sangre es considerada ilegal. En otros países, se permiten ciertos límites de tolerancia, pero siempre por debajo de niveles que se consideran peligrosos para la seguridad vial.
Por este motivo, en la Argentina, la política de «Tolerancia Cero» hacia la conducción bajo los efectos del alcohol se ha ido estableciendo en los últimos años en varias provincias y ciudades del país. Esta política se basa en la idea de que cualquier cantidad de alcohol en sangre puede afectar negativamente la capacidad de conducción y, por lo tanto, no se permite ningún tipo de consumo de alcohol antes de conducir.
De modo que el artículo 48 de la Ley de Tránsito 24.449 fue modificado para disminuir la cantidad permitida de alcohol en sangre por parte de los conductores, de esta manera se baja de los 0.5 gr/l de sangre a cero (0) en todo el país, aunque el límite ya era 0,0 gr/l para los conductores de transporte de pasajeros y de carga.
Sin importarle dichas modificaciones, el Código de Tránsito y Transporte porteño estipula límites máximos de alcohol en sangre dependiendo del caso: 0,5 gr/l en vehículos particulares y 0,2 gr/l para conductores de motos (y 0,5 gr/l para sus acompañantes). Pero, además, establece el tope de 0,0 gr/l en conductores principiantes -condición que dura por seis meses- y profesionales, como taxistas, colectiveros, camioneros. Es decir, que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires rige otro esquema de control de alcoholemia distinto al de las provincias y dicha normativa modificada no tiene vigencia actualmente.
Sin embargo, algunas provincias y ciudades del país han ido implementando políticas de «Tolerancia Cero» hacia la conducción bajo los efectos del alcohol, estableciendo límites de tolerancia de 0,0 g/l. La norma rige en la provincia de Buenos Aires, Córdoba, Chaco, Jujuy, Chubut, Entre Ríos, La Rioja, Río Negro, Salta, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Tucumán. Y las sanciones van desde multas a arrestos, retención de la licencia, inhabilitación para conducir y la aprobación de cursos sobre el correcto uso de la vía pública.
Es menester destacar que la conducción bajo los efectos del alcohol es una de las principales causas de accidentes de tránsito en todo el mundo, y que cualquier cantidad de alcohol en sangre puede afectar negativamente la capacidad de conducción. Según la OMS el riesgo de sufrir un siniestro mortal es 17 veces mayor para una persona que conduce bajo los efectos del alcohol
Por lo tanto, es fundamental tomar conciencia de la importancia de evitar el consumo de alcohol antes de conducir, y respetar las normativas de cada provincia o ciudad en cuanto a la tolerancia de alcohol en la conducción. Además, es importante recordar que las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol pueden incluir multas, retención del vehículo, inhabilitación para conducir e incluso penas de prisión, por lo que es fundamental tomar decisiones responsables y cuidar la seguridad vial.
De tal manera que la política de «Tolerancia Cero» ha generado discusiones y debates entre especialistas, autoridades y la sociedad en general. Por un lado, quienes apoyan la política de «Tolerancia Cero» argumentan que es la forma más efectiva de prevenir accidentes de tránsito relacionados con el consumo de alcohol. Según estadísticas del Observatorio Vial de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, en la Argentina, en 2020 se registraron 5.601 víctimas fatales en accidentes de tránsito, de las cuales el 6,9% estaban relacionadas con la ingesta de alcohol.
Asimismo, quienes apoyan esta política argumentan que es una forma de enviar un mensaje claro y contundente a la sociedad sobre la importancia de evitar la conducción bajo los efectos del alcohol. También destacan que la política de «Tolerancia Cero» permite reducir los límites de tolerancia de alcohol en la sangre de forma gradual, lo que puede generar cambios culturales y de hábitos de consumo de alcohol en la sociedad.
Por otro lado, quienes se oponen a la política de «Tolerancia Cero» argumentan que puede ser excesivamente punitiva, ya que no permite ningún tipo de consumo de alcohol antes de conducir, incluso en cantidades mínimas que no afectan negativamente la capacidad de conducción. Al mismo tiempo, destacan que, en algunos casos, los límites de tolerancia de alcohol en la sangre pueden ser difíciles de detectar y pueden dar lugar a situaciones injustas.
En conclusión, el consumo de alcohol y la conducción son dos elementos que nunca deben mezclarse. A lo largo de este artículo, hemos explorado las diferentes facetas del impacto negativo que el alcohol puede tener en la seguridad vial. Desde la disminución de las funciones esenciales para una conducción segura hasta los comportamientos de riesgo asociados, queda claro que conducir bajo los efectos del alcohol pone en peligro no solo la vida del conductor, sino también la de todos los demás usuarios de las vías.
Es crucial entender que las consecuencias de la conducción bajo los efectos del alcohol no se limitan a la persona que toma la decisión irresponsable de ponerse al volante. Las víctimas de estos accidentes pueden ser inocentes acompañantes, otros conductores o usuarios más vulnerables, como peatones, ciclistas y motociclistas. Cada vida perdida o afectada por un accidente relacionado con el consumo de alcohol es una tragedia evitable que nos recuerda la importancia de tomar decisiones responsables.
Las autoridades, los organismos de seguridad vial y la sociedad en general tienen un papel fundamental en la promoción de políticas y campañas educativas que enfaticen la importancia de la responsabilidad y la prevención en la conducción. Recordemos siempre que la seguridad vial es un compromiso colectivo. Tomemos decisiones informadas y responsables, evitemos el consumo de alcohol antes de conducir y fomentemos una cultura vial basada en el respeto, la precaución y la protección de la vida.
Fuentes:
- Pilatti, A., Tuzinkievich, F. B., & Pautassi, R. M. (2021). Alteraciones en la conducción simulada de vehículos, impulsividad y atención en la fase ascendente y descendente de la intoxicación por alcohol. Health and Addictions / Salud y Drogas, 21(1). doi: 10.21134/haaj.v21i1.543
- Rosselló J, Munar E, Justo S, Arias RIS. EFECTOS DEL ALCOHOL SOBRE LA ATENCIÓN DIVIDIDA Y LA PRECISIÓN DEL CAMBIO ATENCIONAL. Psicothema. 1998;10(1). Universitat de les Illes Balears
- Giménez JCM, Motos P, Cortés-Tomás MT, De Psicología F. FACTORES ASOCIADOS EN LA RELACIÓN ALCOHOL-CONDUCCIÓN EN JÓVENES CONDUCTORES RELATED FACTORS IN DRIVING UNDER THE INFLUENCE OF ALCOHOL AMONG YOUNG DRIVERS. Red De Revistas Científicas De América Latina, El Caribe, España Y Portugal – Sistema De Información Científica. Published online January 1, 2014. https://www.redalyc.org/pdf/839/83931686002.pdf Instituto de Investigación de Drogodependencias Alicante, España
- Kenkel D. Do drunk drivers pay their way? a note on optimal penalties for drunk driving. Journal of Health Economics. 1993;12(2):137. doi:10.1016/0167-6296(93)90024-9
- Shults RA, Elder RW, Sleet DA, et al. Reviews of evidence regarding interventions to reduce alcohol-impaired driving. American Journal of Preventive Medicine. 2001;21(4):66-88. doi:10.1016/s0749-3797(01)00381-6
- Compton RG, Blomberg RD, Moscowitz H, Burns M, Peck RC, Fiorentino DD. CRASH RISK OF ALCOHOL IMPAIRED DRIVING. PROCEEDINGS OF THE 16TH INTERNATIONAL CONFERENCE ON ALCOHOL, DRUGS AND TRAFFIC SAFETY. 2002;2002:39-44. http://www.icadtsinternational.com/files/documents/2002_048.pdf
- Tránsito y consumo de alcohol. Argentina.gob.ar. Published May 5, 2023. https://www.argentina.gob.ar/justicia/derechofacil/leysimple/transito-y-consumo-de-alcohol#:~:text=La%20ley%20proh%C3%ADbe%20conducir%20cualquier,miligramos%20por%20litro%20de%20sangre.
- Defensoría. PROYECTO DE LEY “ALCOHOLEMIA CERO.” Defensoría Del Pueblo. https://defensoria.org.ar/wp-content/uploads/2023/02/Proyecto-de-ley-ALCOHOLEMIA-CERO-FINAL.pdf
- Ley 24449 del 23/12/94. http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/0-4999/818/texact.htm
- Argentina.gob.ar. Argentina.gob.ar. https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/ley-27714-2023-383043
- Biblioteca del Congreso de la Nación, Alejandro Lorenzo César Santa. LA ALCOHOLEMIA EN EL TRÁNSITO Y LA SEGURIDAD VIAL.; 2022. https://bcn.gob.ar/uploads/adjuntos/Dossier-239-legis-nacional-alcoholemia-en-el-transito-dic-2022.pdf. ISSN 2314-3215